- Navidad:
- …Paz, amor, abrazos, sonrisas, caridad, buenos deseos y mejores obras.
- …. abrigos raidos, miseria y fría soledad.
- …Reencuentros familiares, ansiados abrazos y emotivas lágrimas de fraternidad.
- …Añoranza, dolor profundo por los que ya no están o nunca han llegado a ser.
- …Regalos bajo el árbol, turrones y mazapanes, amigos invisibles, mensajes telefónicos. Afanes comerciales, en definitiva.
- …Niños sin juguetes, sueños rotos y sonrisas tullidas por la miseria.
- NAVIDAD
- La palabra pierde su sentido y sentimiento de tanto desgastarla con la tarjeta de crédito. Las sonrisas son mas opacas y las ilusiones exclusivamente comerciales. En ocasiones, la forzada alegría nace en la mirada de nuestras madres y las ilusiones de nuestros hijos.
- Sin embargo, también es Navidad:
- Cada uno de los días del año, sin distinción de estación.
- Cuando te sientas frente a tu amigo, y te pierdes en sus palabras..
- Cuando abrazas a tu madre, a tu padre, a tu hijo, como si la oportunidad fuese a derretirse entre los dedos.
- Cuando arrimas el hombro sin que te lo pidan, ofreces una mirada amable al que te antecede en la cola del paro o adivinas el sufrimiento en los ojos de los tuyos.
- Navidad es también la felicidad de perderse en una mirada… “Hoy he sido egoísta. Te he llamado porque te necesitaba y me has reconfortado” u ofrecer un plato de sopa al que acude acuchillado por el frio, con la mirada baja y las manos temblorosas, no se sabe si de puro frio o de orgullo herido.
- En realidad, no sé si lo que nos venden es Navidad. No me gustan las pompas y los abalorios, los colores desbocados e imposibles, las luces, ni los villancicos que han perdido su contenido. Quiero vivir la paz, el amor, los abrazos, los buenos deseos y los mejores hechos, un 25 de abril: cuando tu sonrisa se cruce con la mía, cuando mi mano se pose en tu hombro, cuando te sonría por la calle o un niño se ofrezca al abuelo para afirmarlo en su paso. Cuando tus lagrimas caigan en mis manos y sepas que están seguras. Cuando saques de tu saquito una sonrisa para ofrecérmela porque las mías hayan renunciado a existir.
- En definitiva, y como decía Dickens, “Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año”.
Bajo la lluvia de medianoche
Hace 1 semana
2 comentarios:
Cierto! No nos quedemos en la superficie. Somos mejores que eso, y capaces de hacerlo.
Mil brillantes diarios para tí, Ëlen!!
Gracias Susi...
Es un sentimiento ambivalente... pero así somos: llenos de contradicciones.
Besitos
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